martes, 11 de marzo de 2014

Y se me hace tan pendejo...

Lo único que quiero es saber que eres feliz. Aunque eso signifique alejarme y que ya no sepas nada de mí. Te mereces a una mujer decidida, segura, que sepa lo que quiere. No a una niña que llora por cualquier ridiculez. Y quién sabe si alguien más sería capaz de aguantar lo que he aguantado. Y no ha sido mucho, precisamente porque casi no te veo. Y me tienes cuando quieres. Y se me hace tan pendejo. Y me siento tan pendeja. Se me hace tan pendejo haberte visto 15 o 20 días de 293 que llevamos siendo lo que somos. Si es que somos algo. Y se me hace tan pendejo no saber ni lo que somos. Y llegar a creer que no me quieres por solo dejarme llevar por lo que dicen los demás. Sus estereotipos y reglas patéticas que implica la absurda sociedad. Pero tirarle mierda a la sociedad es muy cliché. Pero en fin. El punto es que podríamos ser lo que nosotros quisiéramos. Porque amor nos sobra. Pero no sabemos cómo aplicarlo. Podríamos serlo todo. Podríamos ser.

No hay comentarios:

Publicar un comentario